Como el silencio es la más desquiciante de las respuestas,

libre quedas de todo miedo, libre quedas de toda confusión.

La caja idiota proveerá de calor y humedad bien actuados,

Yo, quizás pierda el norte y el centro buscando otro cuerpo.

No hay tiempo para las ausencias 
porque el tiempo de las ausencias es eterno.

En el punto más obscuro del abismo
guardo todos mis recuerdos inconfesables...
...será por eso que no le temo a los violentos hoyos negros:
concentraciones indómitas de la memoria inconfesable de dios.

Saben algo las estrellas del amor?
.
La piedra con su estela sabrán de hambres y de entrega?
Fugaz.
?

El llamado se hace eco,
también se hace grito...
aún no hemos aprendido
el idioma de las estrellas.
.
Algunos virtuosos las atrapan en sus telas.
Prodigiosos ojos que ordenan a la mano las maniobras del pincel.
.
Pero noche a noche las observamos en silencio...
el pasado nos alumbra,
y, aunque la luz del sol nos encandile, ahí están,
moviéndose con nosotros.
.
Sí, viajamos juntos por el espacio inexplorado.
Siempre en un lugar diferente al que no regresaremos.
.

Es luna llena.
El rito está hecho.
El fuego encendió tu nombre.
El círculo se cerró.

Segundo llamado:
.
Es cuestión de calibrar millones de corazones.
.
Llamando a las estrellas,
faros del nocturno,
vibren,
irradien,
la espiral.
.
Bien adentro de nuestras cadenas.
Sí, ahí donde se ordenan las hebras
en los genes quiero que lleguen
y reordenen todas las hélices.
.
Una transcripción nueva
o quizás solo requiérase
una luz de memoria que despierte
el universo en nuestros núcleos.
.


Siente el infinito palpitante.
.

Nuestro tiempo es ahora y
otros tiempos fueron sus ahora.
.
El eco es el mismo.
Lo oigo mientras respiras entre beso y beso.
.
Diría: ¡escúchalo empresario!
Diría: ¡escúchalo soldado!
Diría: ¿lo entiendes mercenario?
.
Disfrutas explotando cuerpos
no temes a la sangre de los niños,
Qué ven tus ojos mezquinos?
Qué compras para calmar tus vergüenzas?
.
Nos enferma toda tu barbarie.
.
¿Qué placer en el lujo justifican tus muertos?
.
Llamo al torrente que viaja por tus arterias,
muy dentro de él corren la furia y la ignorancia plenas.
.
Quiero tu condena.
.
.